TODO COMENZO CON UN ENTRENADOR DE BASEBALL:
Hace 55 años, el León Jim Graver, entrenador de béisbol, inició lo que hoy es el programa mundial Leo.
En 1957, Jim Graver era el entrenador de béisbol de la escuela de segunda enseñanza de la población de Abington, Estado de Pensilvania, Estados Unidos. Graver era también un socio muy activo del Club de Leones de Glenside.
Jim Graver, en varias conversaciones con uno de sus compañeros Leones, William Ernst, había mencionado la idea de crear un club de servicio, al estilo de los Leones, pero para jovencitos estudiantes de bachillerato. En un artículo del periódico The Evening Bulletin del 7 de octubre de 1976, se cita que el León Ernst había dicho que "los Kiwanis tienen los Key Clubs y los Rotarios tienen a los Wheel Clubs" (nombre que posteriormente fue cambiado a Interact).
Ambos Leones resolvieron pedir el apoyo de su club de Leones. Por unanimidad, los socios del club decidieron que organizar un club juvenil era una gran idea.
Graver y Ernst se dedicaron con intensidad al trabajo de organización.
"Necesitábamos un núcleo, un grupo de jóvenes con quiénes pudiéramos comenzar", dijo Ernst. "Así que le dijimos al hijo de Jim que viniera a la primera junta, acompañado de todo su equipo de béisbol". Nueve jóvenes de diferentes cursos de secundaria se unieron a los 26 jóvenes del equipo de béisbol.
Los 35 estudiantes, de común acuerdo, formaron un club. El 5 de diciembre de 1957, los Leones de
Glenside entregaban el Certificado de Fundación al Club Leo del Colegio de Abington.
Poco después, el primer club Leo del mundo creaba su divisa: Liderazgo, Equidad, Oportunidad (la palabra Equidad fue posteriormente cambiada a Experiencia), y escogía los colores de su emblema, que eran los mismos de su escuela: marrón y oro.
UNA IDEA QUE SE HIZO REALIDAD:
Los Leos de Abington fueron el único club de jóvenes voluntarios hasta 1963. En ese año, otro club Leo fue fundado en la Escuela de Secundaria de Tamaqua, también en el Estado de Pensilvania. Poco después, un León de Filadelfia fundó un club Leo en el Estado de Nueva York. Para 1964 ya había 27 clubes Leo en Pensilvania y uno en Nueva York.
El círculo de clubes juveniles de servicio humanitario se ampliaba. En octubre de 1967, la junta directiva internacional de la Asociación de Clubes de Leones adoptaba oficialmente como propio el Programa de Clubes Leo. Los fines de este programa eran, y siguen siendo: "ofrecer a la juventud del mundo entero la oportunidad de desarrollarse y contribuir, individual y colectivamente, como miembros responsables de la comunidad local, nacional e internacional". Al programa Leo pueden entrar chicos y chicas.
En 1968, los nuevos clubes Leo que se iban formando enviaban a la sede internacional de los clubes de Leones sus solicitudes de certificación. El 17 de octubre de 1969 llegaba a la oficina internacional la solicitud de certificación del Club Leo de la Escuela de Abington. En esa fecha, el primer club Leo recibió su certificación oficial en el Programa Leo. El Leo John Hebert, oriundo de la población de Baederwood, Pensilvania, fue el primer presidente del Club Leo de Abington.
Muy pronto, los Leones de todo el mundo comenzaron a enterarse del éxito del Programa de Clubes Leo. Para el 15 de octubre de 1970 ya había 24.000 socios Leo y 918 clubes en 48 países.
Ahora el Programa Leo es más fuerte que nunca. El servicio a la ciudadanía local sigue siendo el punto fuerte de todo club Leo. Al igual que los Leones, los socios Leo ayudan al prójimo con excelentes resultados.
CINCO MIL CLUBES DESPUES:
En 1996 hubo otro acontecimiento importante para el Programa de Clubes Leo. El 12 de abril la oficina
internacional recibió la solicitud de certificación del club Leo número cinco mil. Se trataba del Club Leo
de Fómeque Monarca, en Colombia. Su presidente fue el Leo Ariel Wilfredo Hurtado Rodríguez. Su padre es León.