Lo que se conoce hoy como La Mata, en tiempo de la Restauración de La República se denominaba El Higüerito, y no era más que un pequeño caserío cuyo centro se ubicaba en una casa grande de madera situada en el camino que conduce a La Bija, propiedad de la familia Romero, la cual se encuentra en la historia dominicana, por un acontecimiento ocurrido en dicha vivienda, donde se tramaba el derrocamiento del gobierno de Mon Cáceres en 1908.
También era nativo de esta comunidad Francisco Suriel, soldado de la restauración, de acuerdo a Rufino Martínez en su Diccionario Biográfico-histórico, murió heroicamente al ser disparado un cañón que mantenía a pulso para que otro soldado pudiera hacer puntería hacia la fortificación ocupada por los españoles. Antes de que el poblado pudiera extenderse a lo largo de la carretera hoy Cotuí-La Vega, esta parte se conocía con el nombre de “Camino Real” porque además de que estaba lleno de palmeras reales, era la más importante vía de comunicación de la República Dominicana. Samuel Hazard, narra sus pasos por este lugar (1871) en su obra “Santo Domingo, su Pasado y Presente” y dice: “Dejando al Yuna y uno de sus afluentes (se refiere al Capacho) entramos en un camino deliciosamente umbrío y tapizado de hierba, (sic) hasta que nos encontramos con el Camino Real, una (…) amplia avenida en bosque, pues las palmeras reales que habían sido plantadas en línea para sombrear la ruta seguían dándole un aspecto imponente y agradable”. A partir de la inauguración de los canales de riego, en los primeros años de la década del 1950, como consecuencia del surgimiento de una superproducción de arroz en esta zona, es cuando se inicia a la vez un acelerado desarrollo económico lo que da lugar a una masiva inmigración, se establecen en esta zona una cantidad considerable de habitantes procedentes de las regiones Sur y Noroeste del país, especialmente de los campos de San Juan de La Maguana y Monte Cristi. Se dice que el lugar después de su extensión comenzó a conocerse con el nombre de La Mata, por una mata de mango ubicada cerca del camino vecinal que conduce a Los Corozos, donde los moradores del Higüerito decían: “Ve a la mata"